sábado, 1 de marzo de 2014

VER A TRAVÉS DE UN VELO DE POLVO

                   Imagen artística del Telescopio Espacial Spitzer - Crédito: Nasa/JPL-Caltech
El Telescopio Espacial Spitzer,  fue lanzado el 25 de agosto de 2003, se mantiene en una órbita única alrededor del Sol, observando un Universo ópticamente invisible debido al polvo y la luz de las estrellas. La posibilidad de observar el universo en el rango del infrarrojo, culminó cuando Spitzer de la NASA  logró observar el espacio en este rango óptico.
Las observaciones del 07 de febrero revelaron la presencia de un punto brillante - la supernova – que no estaba presente en las observaciones anteriores. Para el 12 de febrero, la supernova comenzó atenuarse en cierta medida en relación a la observación durante la primera semana de febrero. La supernova, llamada SN 2014J, fue vista por primera vez por observadores humanos, el 21 de enero de 2014.
SN 2014J está brillando intensamente en el rango de luz infrarroja, opción que Spitzer ve. El telescopio fue capaz de observar la supernova antes y después de alcanzar su máximo brillo. Tales observaciones iniciales con un telescopio infrarrojo sólo se han obtenido en el pasado, de algunas supernovas de tipo similar.
 Esta imagen muestra una vista de Spitzer de la Galaxia anfitriona de la supernova, M82 o "Galaxia del Cigarro", en tres fechas diferentes: 9 de mayo-2005; 07 de febrero-2014, y 12 de febrero-2014. Crédito Spitzer Space Telescope/NASA / JPL-Caltech et al.
 El polvo en la galaxia M82 oculta parcialmente las observaciones en el rango óptico y por  la alta energía lumínica generada por las estrellas. La luz infrarroja que Spitzer ve, sin embargo, puede pasar a través de este polvo, permitiendo a los astrónomos sondear directamente en el corazón las secuelas de una explosión estelar. Los investigadores están utilizando actualmente estos datos para obtener más información sobre cómo se producen estos eventos. En la imagen, la luz de los canales infrarrojos logrados por Spitzer, son de color azul en 3,6 micrones y el verde en 4,5 micrones.
“En este momento de la evolución de la supernova, las observaciones en infrarrojo (permiten que) echemos un vistazo más profundo en el evento”, dijo Mansi Kasliwal, Hubble Fellow y Carnegie-Princeton Fellow en los Observatorios de la Institución Carnegie para la Ciencia e investigador principal de las observaciones efectuadas  con el Telescopio Espacial Spitzer, “Spitzer es realmente bueno para pasar el polvo y observar lo que sucede dentro y alrededor del sistema estelar que dio lugar a esta supernova”.
 La supernova más cercana en su tipo que se ha podido observar en las últimas décadas, ha generado una campaña mundial de observación,  implicando a legiones de instrumentos sobre el terreno y en el espacio, incluyendo el Telescopio Espacial Spitzer de la NASA. Crédito de la imagen: NASA / JPL-Caltech / Institución Carnegie para la Ciencia.
Las supernovas son algunos de los acontecimientos más poderosos del universo, liberando tanta energía que una sola explosión puede eclipsar toda una galaxia. La nueva supernova SN2014J, es de un tipo especial, la cual se individualiza como Tipo  Ia  o “candelas estándar”, permiten a los astrónomos precisar las distancias a las galaxias cercanas. Por lo tanto, las supernovas de tipo Ia  cumplen una crucial función, permiten medir la expansión del Universo, ya que casi siempre que explotan con la misma cantidad de energía, brillan con un brillo máximo casi uniforme
El resultado final de una supernova, es la destrucción completa del pequeño remanente de  una estrella enana blanca, densa, con edad semejante a la de una estrella típica como nuestro Sol. Para llegar a este evento final, se presentan dos escenarios: En primer lugar, un sistema binario de estrellas, una enana que tira gravitacionalmente la materia de su estrella compañera, acumulando masa hasta que la enana blanca cruza el umbral crítico y explota. En segundo lugar, en un sistema binario de espiral, dos enanas blancas tiran hacia adentro una hacia la otra, chocando finalmente de forma explosiva. Estudiar la supernova SN2014J, ayudará a la comprensión de los procesos que subyacen a las detonaciones de tipo Ia que permiten perfeccionar los modelos teóricos.
Enlace vídeo aquí
En realidad, la casualidad fue la razón de que el Telescopio Espacial Spitzer observara la supernova; él había sido programado observar la Galaxia M82  para el 28 de enero, fecha que correspondió a una semana después de que los estudiantes y personal de la Universidad College de Londres, vieran por primera vez a SN2014J, evento ocurrido el 21 de enero. Observaciones posteriores se efectuaron el 07, 12 19 y 24 de febrero, la siguiente programación de observación esta programada para el lunes 03 de marzo.
La supernova se mantiene brillando intensamente en el rango del infrarrojo, lo que Spitzer ve. El telescopio fue capaz de observar la supernova antes y después de alcanzar su máximo brillo. Los investigadores están utilizando los datos obtenidos, con el propósito de aumentar su información referente a como se producen estas explosiones.
Fuente: JPL-Caltech / NASA / Spitzer / El Economista / Hubble site /