lunes, 15 de marzo de 2010

GLACIARES EN DESHIELO



Imagen: Glaciar de Los Alpes

SINGAPUR/ANCHORAGE (Reuters) - El mundo se ha vuelto demasiado caluroso para el glaciar Exit en Alaska. Al igual que muchos glaciares que se encuentran a baja altitud, el Exit se está derritiendo sostenidamente. Se ha contraído 3 kilómetros en los últimos 200 años, a medida que trata de encontrar un nuevo equilibrio con el aumento de las temperaturas.

En el Parque Nacional de los fiordos Kenai al sur de Anchorage, los especialistas han aprendido a seguir al Exit y a otros glaciares, a mover carteles y senderos para acomodar los efímeros ríos de hielo azul y blanco mientras retroceden a los valles profundamente tallados.

"Algunas cosas están cambiando tan rápidamente que ahora tenemos carteles sobre pedestales móviles", dijo Fritz Klasner, especialista en recursos naturales de Kenai.Las grandes cantidades de agua almacenada en los glaciares juegan roles cruciales en el flujo de los ríos, la generación de energía hidroeléctrica y en la producción agrícola, contribuyendo a la corriente de los ríos Ganges, Yangtze, Mekong e Indus en Asia y otros lugares.Pero muchos se derriten con rapidez, incrementando su ritmo en laúltima década. Esto le da a los glaciares un papel central en el debate sobre las causas y los efectos del cambio climático. Ese papel ha quedado más marcadamente en el centro de atención tras los recientes ataques contra el panel climático de la ONU, que incluyó un cálculo erróneo del ritmo del derretimiento de los glaciares del Himalaya en un informe de 2007. El reporte decía que los glaciares del Himalaya podían derretirse para2035, un error aparentemente tipográfico que provino de usar material científico no publicado. Los escépticos aprovecharon el error y lo usaron para cuestionar los hallazgos del panel en materia de cambio climático. Pese a todo, la evidencia sobre el rápido derretimiento de los glaciares es abrumadora.El problema es que nadie sabe con exactitud qué está ocurriendo en los Himalayas y en partes de los Andes. Mediciones mucho mejores son cruciales para comprender realmente el riesgo para millones de personas río abajo."No hay información seria sobre el estado del derretimiento de losglaciares en el complejo himalayo-tibetano" , dijo a fines de febrero Kurt Lambeck, presidente de la Academia Australiana de Ciencias.

Lagran altitud y lejanía de muchos glaciares en los Himalayas y los Andes son la principal razón.

DATOS CONGELADOS

Para tratar de llenar a brecha, el primer ministro indio Manmohan Singh dijo en febrero que su Gobierno establecería un Instituto Nacional de Glaciología Himalaya al norte del paÌs.En Europa y América del Norte, los glaciares usualmente son accesiblesy hay más personas calificadas para estudiarlos.El glaciar Aletsch de Suiza, el más grande en los Alpes, ha estado retrocediendo durante unos 150 años. Pero se estima que el glaciar, que alimenta al río Ródano, todavía almacena 27.000 millones de toneladas de hielo, según www.swissinfor. ch. Eso equivale a 12 millones de piscinas olímpicas de natación. En 2008, un total de 79 glaciares suizos estaban en retroceso,mientras que 5 estaban avanzando, según la red de Monitoreo de Glaciares de ese país."Hay un pequeño número de glaciares que son monitoreados" , dijo el veterano glaciólogo Ian Allison, indicando que hay menos de 100 a nivel mundial de los que existen mediciones regulares de "equilibriode masa", el cual refleja cuánto crece o cuánto se contrae un glaciarde un año a otro.Tales medidas son el punto de referencia y los datos de varias décadas son considerados como el mejor modo de elaborar una imagen precisa de lo que está ocurriéndole a un glaciar.

Los glaciares parten de la tierra y representan una considerable acumulación de nieve y hielo a través de los años. Estos tienden a abrirse camino por los valles a medida que se acumula más hielo hasta el punto en el que se pierde más por medio del derretimiento que lo que se acumula.

SENSACION DE ENCOGIMIENTO

"Probablemente sepamos menos sobre el volumen total de los glaciares que lo que sabemos sobre cuánto hielo hay en las grandes capas dehielo en Groenlandia y la Antártida porque gran parte de este está en pequeñas masas y es inaccesible" , dijo Allison.El Servicio Mundial de Monitoreo de Glaciares en Suiza analiza datos del equilibrio de masa de poco más de 90 glaciares y dice que su equilibrio promedio sigue decreciendo.Desde 1980, la pérdida de espesor acumulativo del grupo de glaciaresde referencia equivale a unos 12 metros de agua, dice en su último informe de 2007/08. Los cálculos varían, pero los glaciares y las cimas de las montañas podrían contribuir en unos 70 centímetros a los niveles marítimos globales, según decía un informe de 2009 de Allison y otros destacados científicos. El informe "Diagnóstico Copenhague" del Centro de Estudios sobre Cambio Climático de la Universidad de New South Wales dice que hay abundante evidencia de un más rápido derretimiento de glaciares y capas de hielo desde mediados de los 90.Eso significa que la escorrentía por el derretimiento de los glaciaresy las capas de hielo está elevando los niveles marítimos en 1,2 milímetros al año, lo que equivaldría a 55 centímetros para 2100 si se acelera el calentamiento global.

En Nepal, el Centro Internacional para el Desarrollo Integrado de Montaña dice que las mediciones de "equilibrio de masa" aportarían evidencia directa e inmediata del incremento o reducción del volumende los glaciares."Pero todavía no hay mediciones sistemáticas del equilibrio de masa glacial en la región si bien hay signos prometedores de que esto está cambiando", dijo el centro recientemente.Este estudio decía que en base a estudios, la mayoría de los glaciaresen la región están en una condición de retroceso general."Los glaciares pequeños por debajo de los 5.000 metros sobre el nivel del mar probablemente desaparezcan para fin de siglo, mientras que los glaciares más grandes muy por sobre este nivel seguirán existiendo pero serán más pequeños", señaló el informe. Los glaciares casi se han desvanecido de la isla de Nueva Guinea y en Africa, mientras que muchos en Groenlandia, la península antártica y el oeste de la Antártida también están derritiéndose con rapidez,volcando grandes cantidades de hielo en el mar.

(Reporte adicional de Krittivas Mukherjee en Nueva Delhi y GopalSharma en Katmandú. Editado en español por Javier Leira)

Fuente: Actualidad espacial

El TERREMOTO Y LOS CIENTIFICOS

El terremoto de Chile no es una sorpresa para los sismólogos
En la zona de Concepción no se había registrado un gran seísmo desde el año 1835, que relató Charles Darwin en su oportunidad.
"En el peor escenario, el área [Concepción-Constitución, en Chile] tiene ya un potencial para que ocurra un terremoto de magnitud tan grande como 8 o 8.5 en un futuro próximo", señalaron unos científicos el año pasado.
La advertencia pudo pasar desapercibida para muchos, aunque es cierto que, sin una fecha exacta, tampoco cabían medidas de urgencia que tomar al respecto para evitar la catástrofe que finalmente se ha producido en Chile a finales de febrero. Pero la investigación muestra cómo la ciencia avanza en el conocimiento de las tensiones y procesos que desencadenan los terremotos, aunque no sea capaz de precisar con antelación dónde se va a producir uno, cuando y de qué magnitud (los tres parámetros clave que debería tener una predicción sísmica).

Los científicos, liderados por J.C.Ruegg (Instituto de Física del globo, París) y sus colegas utilizaron medidas de desplazamientos de las placas tectónicas en la región chilena con dispositivos GPS durante varios años, con programas de software adaptados a sismología, y constataron que se estaban produciendo movimientos de hasta 68 milímetros por año (lo que se traduce en más de diez metros de desplazamiento acumulado desde el último terremoto allí, en 1835). Esto supone tensiones acumuladas en la corteza terrestre que acaban desencadenar terremotos. Ellos hicieron las medidas entre 1996 y 2002 en una red de unos 40 puntos marcaos con GPS.
La costa chilena es una de las zonas sísmicas más activas del planeta, explicaba en 2009 el equipo de J.C.Ruegg en Physics of the Earth and Planetary Interiors. Como media, se ha producido un gran terremoto de magnitud 8 cada 10 años a lo largo de la historia allí y la única excepción era hasta ahora precisamente la región comprendida entre 35º y 37º de latitud Sur (Concepción-Constitución), que sufrió el último gran seísmo el 20 de febrero de 1835 (nota copilador: el actual fue 27 de febrero de 2010 - dif. 7 días en 175 años).
Fue el terremoto que pilló a Charles Darwin por la zona en su largo viaje y que relató en una carta a su hermana Caroline.
"Supongo que debe ser el peor [terremoto] que jamás haya sufrido Chile", escribe el joven que llegaría a ser grandísimo biólogo de la Teoría de la Evolución, "No merece la pena intentar describir las ruinas [...] es el espectáculo más horrible que he presenciado. La ciudad de Concepción no es ahora más unos montones de ladrillos, tejas y maderos [...] no ha quedado una casa habitable [...] la fuerza del terremoto ha debido ser inmensa, la tierra está atravesada por desgarros, las rocas están desplazadas, sólidos contrafuertes de dos a tres metros de grosor están rotos en fragmentos como si fueran galletas".

Desde aquel desastre relatado por el ilustre científico británico y cuya descripción bien podría aplicarse ahora, la región no había sufrido grandes terremotos (aunque si que se habían registrado al Norte y al Sur) y se habían acumulado allí tensiones internas en la tierra capaces de desencadenar un gran seísmo.

Los terremotos allí se llaman de subducción. En ellos, una placa tectónica se va metiendo bajo la contigua, en este caso es la gran placa oceánica de Nazca que se desliza bajo la placa continental sudamericana. La placa empuja, la presión va en aumento bajo tierra y aumenta la tensión hasta que acaba por deformarse y se produce el terremoto. El mismo mecanismo de subducción fue culpable del seísmo de Sumatra. En el caso de Haití, sin embargo, no hubo subducción sino movimiento relativo de la placa del Caribe respecto de la placa norteamericana.

Los científicos conocen estos mecanismos cada vez mejor, pero poder hacer una predicción útil para evitar la tragedia humana y económica es todavía un sueño. En el caso de Ruegg y sus colegas la advertencia del terremoto inminente en Concepción-Constitución difícilmente podría haber salvado vidas al carecer de una estimación adelantada del momento de la catástrofe, ya que es prácticamente imposible evacuar a miles de personas durante un tiempo indefinido. Por ahora, mientras no se pueda advertir con antelación cuándo se va a mover la tierra, dónde y cuánto, la ayuda más realista es imponer la construcción antisísmica en las zonas de riesgo, aconsejan una y otra vez los expertos.
Fuente: El País.com - Alicia Rivera Madrid 07.03.2010 según Actualidad Espacial